Morelia, Michoacán a 09 de octubre del 2009. Al reconocer que no se puede inhibir la migración por ser un fenómeno de carácter cultural, el visitador regional de Zamora, Luis Alberto Montaño García, urgió a establecer políticas públicas que permitan atender el fenómeno desde su origen.
En ese sentido el funcionario de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) señaló que los programas y acciones encaminados a este sector de la población en su mayoría solo sirven como paliativos y no dan respuesta a un problema real que se agudiza cada vez más ante la necesidad de las personas de alcanzar la supervivencia en lugares distintos al de su lugar de origen.
Durante su participación en el panel “La Relación de los Migrantes con el Estado y los Organismos No Gubernamentales (ONG’S) que se desarrolló en el marco del Primer Congreso de los Derechos Humanos de los Migrantes en México y en el Extranjero en el Auditorio “Samuel Ramos” de la UMSNH, expresó: “la migración no se puede inhibir, pero lo que si se puede hacer es evitar que se haga por necesidad, en ocasiones de lo más lastimosa”.
Dijo que siendo Michoacán el primer estado emisor de mano de obra a los Estados Unidos, donde desde que salen de su domicilio con dirección al vecino país se registran un sinnúmero de violaciones a los derechos humanos de los migrantes de las cuales destacó: el no proporcionar a los connacionales un proceso adecuado en materia penal, el no contar con intérprete al momento de un arresto, el de presunción de inocencia y el de libre tránsito, además de las vejaciones a desde las hechas por servidores públicos como los cuerpos policiacos, agentes aduanales, hasta los miembros de la sociedad en los lugares por donde transitan hacia la búsqueda de las oportunidades que no encontraron aquí.
Aunque reconoció que en los últimos años se han logrado avances en la materia, consideró que se requiere de un trabajo conjunto para lograr mejores resultados; además enfatizó en la necesidad de que las organizaciones no gubernamentales interactúen con los organismos defensores de los derechos humanos “que sean los ojos y los brazos de la Comisión para detectar posibles violaciones a los derechos fundamentales de los ciudadanos”.
Montaño García dejó claro que desde el organismo se trabaja para defender a los migrantes y para garantizar el pleno respeto de sus derechos, pero también los conminó a presentar sus quejas en los casos de ser objeto de atropellos por parte de las autoridades federales, estatales y municipales; toda vez que son pocos los paisanos que se acercan al organismo.
En el panel también participaron la secretaria del Migrante, Saira Mandujano Fernández; el presidente de la Comisión Legislativa de Asuntos Migratorios, Antonio García Conejo; el presidente de la Comisión Legislativa de Gobernación, Enrique Bautista Villegas; así como el organizador del evento Rafael Luviano González.
En ese sentido el funcionario de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) señaló que los programas y acciones encaminados a este sector de la población en su mayoría solo sirven como paliativos y no dan respuesta a un problema real que se agudiza cada vez más ante la necesidad de las personas de alcanzar la supervivencia en lugares distintos al de su lugar de origen.
Durante su participación en el panel “La Relación de los Migrantes con el Estado y los Organismos No Gubernamentales (ONG’S) que se desarrolló en el marco del Primer Congreso de los Derechos Humanos de los Migrantes en México y en el Extranjero en el Auditorio “Samuel Ramos” de la UMSNH, expresó: “la migración no se puede inhibir, pero lo que si se puede hacer es evitar que se haga por necesidad, en ocasiones de lo más lastimosa”.
Dijo que siendo Michoacán el primer estado emisor de mano de obra a los Estados Unidos, donde desde que salen de su domicilio con dirección al vecino país se registran un sinnúmero de violaciones a los derechos humanos de los migrantes de las cuales destacó: el no proporcionar a los connacionales un proceso adecuado en materia penal, el no contar con intérprete al momento de un arresto, el de presunción de inocencia y el de libre tránsito, además de las vejaciones a desde las hechas por servidores públicos como los cuerpos policiacos, agentes aduanales, hasta los miembros de la sociedad en los lugares por donde transitan hacia la búsqueda de las oportunidades que no encontraron aquí.
Aunque reconoció que en los últimos años se han logrado avances en la materia, consideró que se requiere de un trabajo conjunto para lograr mejores resultados; además enfatizó en la necesidad de que las organizaciones no gubernamentales interactúen con los organismos defensores de los derechos humanos “que sean los ojos y los brazos de la Comisión para detectar posibles violaciones a los derechos fundamentales de los ciudadanos”.
Montaño García dejó claro que desde el organismo se trabaja para defender a los migrantes y para garantizar el pleno respeto de sus derechos, pero también los conminó a presentar sus quejas en los casos de ser objeto de atropellos por parte de las autoridades federales, estatales y municipales; toda vez que son pocos los paisanos que se acercan al organismo.
En el panel también participaron la secretaria del Migrante, Saira Mandujano Fernández; el presidente de la Comisión Legislativa de Asuntos Migratorios, Antonio García Conejo; el presidente de la Comisión Legislativa de Gobernación, Enrique Bautista Villegas; así como el organizador del evento Rafael Luviano González.