Morelia, Mich., 3 de junio del 2011.- Con la novela Ya nadie es perfecto, el escritor Dante Medina, ganador del premio Bellas Artes de Novela “José Rubén Romero” 2010, recibió del secretario de Cultura, Jaime Hernández Díaz, un reconocimiento en la ciudad de Morelia.
El galardón que otorga el Instituto Nacional de las Bellas Artes (INBA), en asociación con el estado de Michoacán fue entregado al escritor jalisciense -radicado durante 15 años en Michoacán- quien es también Profesor Investigador del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH).
La novela ganadora surgió, según refirió Dante Medina, a partir del interés de la investigación que realizó para unos libros que por encargo del CUCS (Centro Universitario de Ciencias de la Salud) había escrito y que eran “entre artísticos y científicos”, por lo que se propuso ahondar en los temas y hacerla de “investigador no oficial”, tanto en Hospitales Civiles de Guadalajara como en la Facultad de Medicina de la UdeG.
Durante la ceremonia protocolaria, en la que también estuvo Stasia de la Garza, coordinadora de Literatura del INBA; Medina señaló que aunque esta obra tiene una propuesta técnica novedosa, lo trascendente radica en la temática, que es la medicina; pues como el autor apunta, la novela se adelantó “y predijo que habría un escándalo con los trasplantes de órganos en los hospitales civiles”, para lo cual se basó en una serie de testimonios al respecto.
Asimismo, Dante Medina calificó su novela no como algo sórdido respecto a miserias humanas, sino como un texto que trabaja en torno a la idea de lo poético, sublimando el trasplante a un acto de intercambio amoroso y símbolo de la condición humana, pero a la vez la considera divertida, sensual y algo escandalosa, en la que también interviene la policía, y desarrollándose todo en el ambiente de la ciudad de Guadalajara.
Por otro lado, Medina resaltó que este premio le significa mucho porque es un galardón a nivel nacional, ya que pocos son los reconocimientos que ha recibido en su país debido a que ha concursado más en el extranjero.
Dicen que mi humor es michoacano, aceptó el galardonado quien vivió durante tres lustros en la tierra caliente michoacana y Uruapan.
Por su parte, Jaime Hernández Díaz, en representación del gobernador de Michoacán, Leonel Godoy Rangel, señaló en esta actividad la descentralización, al reconocer y galardonar a los escritores en el propio estado que lanza la convocatoria de los premios literarios: “es parte de la política cultural de la presente administración, razón por la cual se invitó al autor jalisciense a regresar a “su tierra” y a dar lectura a parte de la obra que rinde homenaje a la brillante figura de José Rubén Romero”.
Paralelamente, Medina dijo: “porque los michoacanos (ya me asimilé así) somos sueltos, dispuestos a la broma, a la risa, al gesto simpático, a la innovación verbal inmediata. Eso lo tengo de Michoacán, me siento profundamente arraigado, mi sentido del humor es completamente michoacano y espero haber probado que soy bueno improvisando como fue José Rubén Romero, el más grande representante michoacano de este humor, de este sentido del desparpajo, la alegría, la bomba, el juego con la lengua. Un escritor tan extraordinariamente universal y cosmopolitamente provinciano”.
El premio Bellas Artes de Novela se entrega anualmente. Además del propio reconocimiento tiene una bolsa de 100 mil pesos y se elige a través de un concurso en el que el jurado no toma en cuenta la trayectoria del autor sino la obra en sí misma.
El autor jalisciense recibió en el Palacio de Bellas Artes, en la ciudad de México, el premio económico que se ha otorgado a 376 escritores, cuentistas, ensayistas, novelistas y poetas, entre quienes se encuentra José Emilio Pacheco, Juan García Ponce, Eraclio Zepeda, entre otros. Todos ellos representantes de la literatura mexicana de poco más de una mitad de siglo.
El galardón que otorga el Instituto Nacional de las Bellas Artes (INBA), en asociación con el estado de Michoacán fue entregado al escritor jalisciense -radicado durante 15 años en Michoacán- quien es también Profesor Investigador del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH).
La novela ganadora surgió, según refirió Dante Medina, a partir del interés de la investigación que realizó para unos libros que por encargo del CUCS (Centro Universitario de Ciencias de la Salud) había escrito y que eran “entre artísticos y científicos”, por lo que se propuso ahondar en los temas y hacerla de “investigador no oficial”, tanto en Hospitales Civiles de Guadalajara como en la Facultad de Medicina de la UdeG.
Durante la ceremonia protocolaria, en la que también estuvo Stasia de la Garza, coordinadora de Literatura del INBA; Medina señaló que aunque esta obra tiene una propuesta técnica novedosa, lo trascendente radica en la temática, que es la medicina; pues como el autor apunta, la novela se adelantó “y predijo que habría un escándalo con los trasplantes de órganos en los hospitales civiles”, para lo cual se basó en una serie de testimonios al respecto.
Asimismo, Dante Medina calificó su novela no como algo sórdido respecto a miserias humanas, sino como un texto que trabaja en torno a la idea de lo poético, sublimando el trasplante a un acto de intercambio amoroso y símbolo de la condición humana, pero a la vez la considera divertida, sensual y algo escandalosa, en la que también interviene la policía, y desarrollándose todo en el ambiente de la ciudad de Guadalajara.
Por otro lado, Medina resaltó que este premio le significa mucho porque es un galardón a nivel nacional, ya que pocos son los reconocimientos que ha recibido en su país debido a que ha concursado más en el extranjero.
Dicen que mi humor es michoacano, aceptó el galardonado quien vivió durante tres lustros en la tierra caliente michoacana y Uruapan.
Por su parte, Jaime Hernández Díaz, en representación del gobernador de Michoacán, Leonel Godoy Rangel, señaló en esta actividad la descentralización, al reconocer y galardonar a los escritores en el propio estado que lanza la convocatoria de los premios literarios: “es parte de la política cultural de la presente administración, razón por la cual se invitó al autor jalisciense a regresar a “su tierra” y a dar lectura a parte de la obra que rinde homenaje a la brillante figura de José Rubén Romero”.
Paralelamente, Medina dijo: “porque los michoacanos (ya me asimilé así) somos sueltos, dispuestos a la broma, a la risa, al gesto simpático, a la innovación verbal inmediata. Eso lo tengo de Michoacán, me siento profundamente arraigado, mi sentido del humor es completamente michoacano y espero haber probado que soy bueno improvisando como fue José Rubén Romero, el más grande representante michoacano de este humor, de este sentido del desparpajo, la alegría, la bomba, el juego con la lengua. Un escritor tan extraordinariamente universal y cosmopolitamente provinciano”.
El premio Bellas Artes de Novela se entrega anualmente. Además del propio reconocimiento tiene una bolsa de 100 mil pesos y se elige a través de un concurso en el que el jurado no toma en cuenta la trayectoria del autor sino la obra en sí misma.
El autor jalisciense recibió en el Palacio de Bellas Artes, en la ciudad de México, el premio económico que se ha otorgado a 376 escritores, cuentistas, ensayistas, novelistas y poetas, entre quienes se encuentra José Emilio Pacheco, Juan García Ponce, Eraclio Zepeda, entre otros. Todos ellos representantes de la literatura mexicana de poco más de una mitad de siglo.